¿Puedes diseñar tus estrategias de inversión sin ser Warren Buffett?

- ●Investiga a las compañías y entiende los productos de inversión para diseñar tus estrategias de inversión y conseguir rentabilizar tu dinero
- ● Si hay una cita de Warren Buffett que ha pasado a la historia es, sin duda, su declaración de que la primera regla para invertir es no perder dinero. Detrás de esta sencilla frase se esconde una forma de pensar que puede serte de ayuda cuando procedas a diseñar tus estrategias de inversión: es importante tomar decisiones inteligentes, basándose en los datos y apostando por inversiones sólidas. Las prisas nunca son buenas cuando se intenta construir algo valioso. Así como resulta peligroso edificar una casa con prisas, sin atender a todas las claves y detalles, lo mismo sucede a la hora de diseñar tus estrategias de inversión. ¿Implica esto que siempre debes ser conservador cuando decides invertir tu dinero? No, lo que debes ser es precavido e informarte con precisión del producto en el que vas a invertir y de la empresa en la que estás depositando tu inversión. Un inversor que pierde dinero no solo no está alcanzando su objetivo primordial, ganarlo, sino que también es menoscabando sus ahorros. En el terreno de los grandes inversores como Buffett, perder dinero es habitual. No todas las apuestas son igual de acertadas. Sin embargo, si las estrategias de inversión son acertadas, las pérdidas se verán compensadas por las ganancias. Mientras que si eres un pequeño inversor, quizás decidas diseñar tus estrategias de inversión poniendo el foco en una toma de decisiones racional y más conservadora, apostando por productos que ofrecen una rentabilidad fija y las máximas garantías de retorno, por ejemplo, las letras, bonos y obligaciones del Tesoro, frente a productos financieros más complejos e inciertos, como los productos derivados. Conduce tus inversiones alternando las luces cortas y las largas
- ●Corre en bici a piñón fijo o cambiando de marchas
- ●Invierte en lo que conoces, apuesta por empresas reales
- ●Diseñar tus estrategias de inversión nunca fue más sencillo
Investiga a las compañías y entiende los productos de inversión para diseñar tus estrategias de inversión y conseguir rentabilizar tu dinero
Warren Buffett es un veterano empresario e inversor estadounidense conocido en todo el mundo por ostentar una de las riquezas más grandes del planeta, gracias a su éxito realizando inversiones desde 1950. A lo largo de más de 70 años, Buffett ha desplegado múltiples estrategias de inversión que lo han llevado hasta lo más alto de la economía global.
Por desgracia, no todos tenemos los mismos conocimientos e instinto que Warren Buffett, lo cual no significa que no puedas diseñar tus estrategias de inversión y conseguir rentabilizar tu dinero.
De hecho, el propio Buffett declaró que la cualidad más importante de todo buen inversor no es la inteligencia, sino el temperamento. Es decir, la capacidad de manejar las inversiones con paciencia, sin dejarse alarmar por las fluctuaciones constantes del mercado y la economía.
Gestionar las inversiones de forma reactiva puede desviar el foco de los objetivos de inversión y granjear más pérdidas que ganancias. Tener temperamento para diseñar tus estrategias de inversión implica, también, no dejarte llevar por los impulsos y ser disciplinado.
Si eres proactivo a la hora de diseñar tus estrategias de inversión, analizas los datos con calma y estudias a las compañías en las que inviertes, obtendrás valiosos frutos a partir de tu dinero.
El propio Warren Buffett, quizás el inversor más prestigioso del último siglo, sostiene que no necesitas ser un científico espacial para diseñar tus estrategias de inversión y generar beneficios económicos.
A continuación, vamos a explorar algunas claves que debes tener en cuenta a la hora de diseñar tus estrategias de inversión para sentar las bases del éxito.
Si hay una cita de Warren Buffett que ha pasado a la historia es, sin duda, su declaración de que la primera regla para invertir es no perder dinero. Detrás de esta sencilla frase se esconde una forma de pensar que puede serte de ayuda cuando procedas a diseñar tus estrategias de inversión: es importante tomar decisiones inteligentes, basándose en los datos y apostando por inversiones sólidas. Las prisas nunca son buenas cuando se intenta construir algo valioso. Así como resulta peligroso edificar una casa con prisas, sin atender a todas las claves y detalles, lo mismo sucede a la hora de diseñar tus estrategias de inversión. ¿Implica esto que siempre debes ser conservador cuando decides invertir tu dinero? No, lo que debes ser es precavido e informarte con precisión del producto en el que vas a invertir y de la empresa en la que estás depositando tu inversión. Un inversor que pierde dinero no solo no está alcanzando su objetivo primordial, ganarlo, sino que también es menoscabando sus ahorros. En el terreno de los grandes inversores como Buffett, perder dinero es habitual. No todas las apuestas son igual de acertadas. Sin embargo, si las estrategias de inversión son acertadas, las pérdidas se verán compensadas por las ganancias. Mientras que si eres un pequeño inversor, quizás decidas diseñar tus estrategias de inversión poniendo el foco en una toma de decisiones racional y más conservadora, apostando por productos que ofrecen una rentabilidad fija y las máximas garantías de retorno, por ejemplo, las letras, bonos y obligaciones del Tesoro, frente a productos financieros más complejos e inciertos, como los productos derivados. Conduce tus inversiones alternando las luces cortas y las largas
Cuando conduces de noche no vas siempre con las luces largas o con las cortas. Si estás solo en la carretera, inmerso en la oscuridad, lo conveniente es poner las luces largas. Sin embargo, si te cruzas con otro vehículo deberás optar por las cortas para no deslumbrarlo.
Al diseñar tus estrategias de inversión también puedes optar por combinar productos a corto y largo plazo. Tanto unos como otros tienen sus ventajas e inconvenientes.
Las inversiones a corto plazo permiten recuperar el dinero invertido y la rentabilidad en un margen de tiempo menor. De tal forma que se pueden emplear tanto lo uno como lo otro para reinvertir en otros productos o para darle el uso que estime oportuno. Entre las inversiones a corto plazo nos podemos encontrar los depósitos, las letras del Tesoro o modalidades de financiación alternativa como el crowdfactoring o el crowdlending.
Mientras que las inversiones a largo plazo requieren más paciencia y, como ya señalamos antes, tener el temperamento idóneo para gestionar las inversiones a lo largo del tiempo y no caer presa de los cambios del mercado. Además, hay que tener en cuenta que durante el tiempo que dure la inversión no se dispondrá del dinero líquido invertido. A cambio, se pueden lograr altas rentabilidades. ¿De qué productos hablamos? Bonos estatales, pero también corporativos, divisas o fondos de inversión.
Por ejemplo, al diseñar tus estrategias de inversión puedes tomar la decisión de invertir en un fondo de pensiones, es decir, a larguísimo plazo, pero, también, invertir en facturas de empresas a través de Inversa Invoice Market, con un plazo de recuperación de la inversión de meses. Y con una obtención de la rentabilidad acordada inmediata.
Corre en bici a piñón fijo o cambiando de marchas
Precisamente, los tipos de rentabilidad son importantísimos cuando procedes a diseñar tus estrategias de inversión. ¿Por qué? Al igual que no es lo mismo una inversión a corto o largo plazo, también es muy diferente obtener una rentabilidad fija que una variable.
En los productos de inversión de rentabilidad fija, se acuerda la devolución del dinero invertido más un porcentaje a mayores, por ejemplo, el 5%. De tal forma que si optas por invertir 500 euros en una factura en Inversa Invoice Market recibirás 525 euros en total. En el caso de nuestra plataforma, los 25 euros de la rentabilidad te serán entregados por adelantado y los 500 que has invertido se te reembolsarán cuando el librado realice el pago de la factura. ¿Cuál es el beneficio de la rentabilidad fija? Existen mayores certezas de recuperar la inversión y el ahorrador se garantiza unas ganancias previamente establecidas.
Por la contra, en los productos de inversión de renta variable, el inversor no tiene garantizada ni la devolución del capital que invirtió, ni una rentabilidad predefinida. Pensemos, por ejemplo, en las acciones de una empresa. El inversor compra las acciones y puede venderlas por mucho más dinero por el que las adquirió, pero también venderlas por menos o no venderlas y ganar los dividendos asociados a ellas en caso de que la compañía tenga beneficios. La renta variable supone aceptar un umbral de riesgo mayor, pero también ofrece la oportunidad de conseguir más beneficios que con los productos de inversión de renta fija.
Habida cuenta de lo que venimos de exponer, ¿por qué rentabilidad debes optar al diseñar tus estrategias de inversión? Por aquella que se adapte mejor a tus necesidades y objetivos. E, incluso, puedes diseñar tus estrategias de inversión combinando productos de renta fija y variable. ¿Quién dijo que no puedes invertir en facturas de pymes y, también, adquirir acciones de multinacionales?
Invierte en lo que conoces, apuesta por empresas reales
Comportamiento, plazos, rentabilidad... ¿Qué más debes tener en cuenta para diseñar tus estrategias de inversión? Las características no solo del producto de inversión, sino también de la compañía o el estado en el que estás invirtiendo.
Muchas personas, cuando piensan en el sector de la inversión, se imaginan productos financieros complejos, que requieren altos conocimientos para entender su funcionamiento y dilucidar si se corresponden con los objetivos que te marcas cuando procedes a diseñar tus estrategias de inversión.
Productos derivados como los futuros, las opciones o los warrants no están pensados para cualquier inversor. En estos casos, sí necesitas disponer de conocimientos o contar con un asesoramiento especializado.
Sin embargo, el sector de la inversión va mucho más allá de los productos y vehículos de inversión más sofisticados. Por ejemplo, los depósitos o las cuentas remuneradas son productos de inversión a los que estamos acostumbrados todos los ciudadanos. Lo mismo puede decirse de las letras del Tesoro. Y, también, del abanico de productos asociados a la financiación alternativa online.
En marketplaces de crowdfactoring como Inversa, puedes saber con precisión en qué inviertes: una factura con una rentabilidad prestablecida de una empresa de la economía real con una calificación crediticia determinada. Tenía razón Warren Buffett, si inviertes en productos fáciles de comprender y en empresas tangibles, no es necesario saber de ingeniería aeroespacial... ni financiera.
Como venimos de señalar, en Inversa puedes diseñar tus estrategias de inversión disponiendo de toda la información relevante sobre las facturas que te ofrecemos, las empresas que las comercializan y los negocios que deben pagarlas. Pero tu capacidad de acceder a datos de valor va mucho más allá de lo que pueda indicarte una entidad bancaria o una plataforma de financiación alternativa. Al fin y al cabo, vivimos en la era de la información.
Cuando procedes a diseñar tus estrategias de inversión puedes consultar en internet todos los datos que desees conocer sobre los productos de inversión que pretendes adquirir y las compañías relacionadas con la operación. Tienes a tu alcance, además, publicaciones y portales especializados en inversión y economía para entender el estado del mercado y las características de las empresas.
Lo cierto es que, hoy en día, el acceso a conocimiento altamente especializado y de gran valor añadido se ha democratizado. Puedes consultar toda la información que desees para diseñar tus estrategias de inversión con la mayor precisión posible. La intuición sigue teniendo su encanto, pero los datos han optimizado la toma de decisiones. Ahora puedes diseñar tus estrategias de inversión analizando en profundidad en qué y quién estás invirtiendo.
Como decimos siempre, en Inversa creemos en las personas que invierten en personas y las ayudamos a rentabilizar sus ahorros.
Diseñar tus estrategias de inversión nunca fue más sencillo
¿Qué conclusión podemos extraer de las diferentes claves que tienes que tener en cuenta para diseñar tus estrategias de inversión? Que a diferencia de los tiempos en los que Buffett comenzó a invertir, hoy en día el acceso al mercado de inversión está al alcance de cualquiera.
Sin ir más lejos, en Inversa Invoice Market, puedes invertir disponiendo solo de 20 euros, desde el salón de tu casa y sin necesitar ningún tipo de asesoramiento.
La digitalización de las entidades financieras tradicionales y la irrupción de las FinTech han transformado la capacidad de acceso al terreno de la inversión y la posibilidad de gestionar las inversiones de forma autónoma.
Por eso, hoy puedes diseñar tus estrategias de inversión con plena libertad, contratando diversos productos de inversión y confeccionando una cartera de inversiones que se adapte a tus intereses, ideas y objetivos.
Definitivamente, no solo Warren Buffett y otros grandes inversores pueden poner en marcha un plan de inversiones ambicioso, tú también puedes diseñar tus estrategias de inversión para sacarle partido a tu dinero y beneficiarte de todas las oportunidades que tienes a tu alcance.