Diversificar las estrategias de inversión para no poner todos los huevos en la misma cesta

Combinar diferentes mecanismos de inversión permite a los ahorradores diversificar las estrategias de inversión y reducir el riesgo que asumen
Seguramente hayas escuchado alguna vez que «todo español lleva dentro un seleccionador nacional». Esta frase popular hace referencia a que muchas personas creen que serían mejores dirigiendo la selección de fútbol que el profesional que ostenta el cargo. Elegirían mejor a los jugadores, prepararían mejor los torneos y diseñarían tácticas más eficaces. En definitiva, serían capaces de diseñar una estrategia para ganar el Mundial o la Eurocopa.
Esta anécdota evidencia que convivimos continuamente con las estrategias y que todos estamos acostumbrados a diseñarlas e implementarlas en múltiples ámbitos de nuestra vida. Gracias a la digitalización de las finanzas y la irrupción de las plataformas de financiación alternativa online también podemos diseñar nuestras estrategias de inversión sin tener que delegar esta tarea en gestores. Pero, ¿qué hay que tener en cuenta a la hora de hacerlo? Un principio fundamental es que resulta recomendable diversificar las estrategias de inversión, para evitar apostar todo a un único caballo ganador.
Si un entrenador de fútbol centra todo su plan en el buen rendimiento de una estrella y esta se lesiona, es posible que toda su estrategia se vaya al traste. En el terreno financiero, diversificar las estrategias de inversión contribuye a no poner todos los huevos en la misma cesta y reducir el riesgo que se asume a la hora de invertir el dinero.
A continuación, vamos a desgranar algunas claves a tener en cuenta a la hora de diversificar las estrategias de inversión y analizar por qué una plataforma de crowdfactoring como Inversa puede ser de gran ayuda para los inversores que desean implementar estrategias en las que se invierta su dinero en empresas de diferentes tamaños y sectores económicos.
Sacarle partido a la diversidad del mercado de la inversión
El mundo ha experimentado enormes cambios en lo que va de siglo, asociados a la revolución tecnológica. Y el sector financiero no se ha mantenido al margen de estas transformaciones. Hoy en día, una persona puede realizar inversiones desde el móvil, ya sea a través de apps de las entidades bancarias tradicionales o de plataformas de crowdfactoring, crowdlending o crowdequity.
Tanto la ganancia en autonomía a la hora de invertir, como la mayor diversidad de actores del sector financiero y de mecanismos de inversión que estos ofrecen han provocado un auténtico cambio de paradigma.
Diversificar las estrategias de inversión nunca ha resultado más sencillo. Una persona puede combinar la inversión en:
- Letras del Tesoro (Estado)
- Acciones en bolsa (Grandes compañías)
- Planes de pensiones
- Crowdfactoring (Empresas de la economía real)
- Etc.
Todas estas inversiones no son excluyentes, sino complementarias y permiten diversificar las estrategias de inversión, financiando a actores diferentes, a través de productos con características también diferentes: a corto plazo o a largo plazo, a renta variable o a renta fija…
Si el mercado nos ofrece una amplia variedad de mecanismos de inversión, ¿por qué no diversificar las estrategias de inversión adaptándolas al 100% a nuestros objetivos?
Combina diferentes productos y sectores para lograr tus objetivos
Precisamente, a la hora de diseñar las estrategias de inversión es fundamental tener en cuenta los objetivos que se persiguen. Es decir, cuánta rentabilidad se espera obtener, en qué plazo, a qué clase de empresas se quiere financiar, en qué sectores económicos se desea invertir…
En función de los objetivos establecidos, se pueden diseñar planes para diversificar las estrategias de inversión y conseguir los resultados deseados.
Como señalamos en el apartado anterior, existe una amplia gama de mecanismos de inversión, desde los productos que ofrecen las entidades financiaras tradicionales, hasta las vías de financiación alternativa como el crowdfactoring. A la hora de seleccionar los productos de inversión que se desean adquirir es fundamental nunca perder de vista que:
- Es imprescindible comprender los mecanismos de inversión.
- Se debe disponer de toda la información necesaria para analizar si una inversión se adecúa o no a los objetivos.
La digitalización también ha tenido un impacto en estas dos cuestiones, puesto que actualmente resulta más sencillo recabar información a través de internet y publicaciones especializadas.
Además, los potentes desarrollos tecnológicos, el empleo del Big Data y la algorítmica avanzada ha permitido a las entidades financieras ofrecer un análisis preciso del comportamiento de las empresas en las que se invierte y otorgar una calificación crediticia exacta.
Todo ello redunda en la apuesta por diversificar las estrategias de inversión, combinando productos con características diferentes e invirtiendo en múltiples sectores económicos. Además, en lo relativo a esto último, no podemos perder de vista el auge de las inversiones sostenibles. Es decir, ahorradores que invierten su dinero en empresas que cumplen con los criterios ASG o llevan a cabo sus actividades en sectores clave para construir un tejido productivo sostenible medioambiental y socialmente.
Moverse con éxito entre la rentabilidad y el riesgo
Si hay una relación central en lo relativo a las inversiones esa es, sin duda alguna, la que existe entre la rentabilidad y el riesgo de una operación. Si simplificamos mucho dicha relación, podríamos concluir que cuanto mayor sea el riesgo, más alta será la rentabilidad prometida. Mientras que, si el riesgo es menor, la rentabilidad también será más baja.
Toda estrategia de inversión ha de cimentarse sobre una serie de objetivos, como señalamos antes, pero también sobre la tolerancia al riesgo del inversor. Hay personas que son más agresivas y prefieren tomar más riesgos en busca de rentabilidades más altas. En cambio, otros inversores pueden preferir ser conservadores y tener las máximas certezas de que recuperarán su inversión, aunque la rentabilidad sea baja.
Al diversificar las estrategias de inversión, los ahorradores pueden combinar productos con un nivel de riesgo mayor, con otros mecanismos que ofrezcan un nivel de riesgo muy limitado. Si una persona decide invertir todo su dinero en un único producto, la posibilidad de conjugar inversiones más rentables con otras menos rentables se desecha.
En cambio, al diversificar las estrategias de inversión se abre la puerta a combinar operaciones más rentables, pero también más arriesgadas, con otras que ofrecen una rentabilidad menor, pero que garantizan el retorno de lo invertido.

Limita el riesgo de tus inversiones
Precisamente, el riesgo es el elemento determinante a la hora de decidir diversificar las estrategias de inversión. Poner todos los huevos en la misma cesta puede ser una decisión exitosa si la inversión sale bien y la rentabilidad que se obtiene es muy atractiva, pero también puede conllevar serios problemas para el inversor.
De ahí que a la hora de diseñar las estrategias de inversión sea conveniente apostar por la diversificación, sobre todo, en el caso de ahorradores que no se dedican profesionalmente a realizar inversiones o trabajan en el sector financiero.
Aunque dispongas de toda la información relevante sobre una operación y esta parezca ofrecerte garantías y se adapta a tus objetivos y necesidades, a lo mejor no debes destinar a ella todo el dinero que deseas invertir.
Diversificar las inversiones te permite tomar ciertos riesgos y, a la vez, invertir en productos más seguros. De tal forma que puedes lograr rentabilidades muy atractivas con algunas de tus inversiones y, en paralelo, invertir parte de tu dinero en productos y empresas que te ofrecen las máximas confianzas.
El riesgo ha sido siempre un elemento que ha desmotivado a los ahorradores a invertir su dinero.
Por suerte, en la actualidad los pequeños inversores pueden informarse con profundidad sobre todos los productos de inversión antes de contratarlos y, además, han ganado en autonomía y tienen a su alcance más mecanismos de inversión como, por ejemplo, el crowdfactoring.
Inversa, una plataforma que te ayuda a diversificar las estrategias de inversión
Precisamente, Inversa Invoice Market, una plataforma de crowdfactoring que sirve como punto de encuentro entre empresas de la economía real y miles de pequeños inversores, puede ser una buena aliada a la hora de diversificar las estrategias de inversión y complementar productos tradicionales con vías alternativas.
En el marketplace de Inversa los ahorradores pueden invertir a partir de tan solo 20 euros y pueden diversificar su dinero en todas las operaciones que deseen.
A través de esta plataforma, cientos de empresas de la economía real, que operan en múltiples sectores (conserveras, alimentación, packaging, calzado, laboratorios, energía…) ofertan sus facturas emitidas, pero no cobradas para obtener liquidez en el corto plazo.
A cambio de invertir en estas facturas, los ahorradores obtienen una rentabilidad una vez que las facturas se han completado y recuperan lo invertido cuando la empresa librada abone el importe de las facturas.
Las facturas en las que se pueden invertir presentan rentabilidades, plazos y calificaciones crediticias diferentes y han de ser pagadas por empresas de múltiples sectores económicos. Esta variedad es crucial a la hora de ayudar a los inversores a diversificar las estrategias de inversión, combinando facturas con características distintas y limitando el riesgo que asumen a la hora de invertir.
Es más, Inversa ofrece, también, facturas aseguradas. Es decir, efectos que cuentan con la garantía de entidades aseguradoras que se harán cargo de la devolución de las inversiones en caso de que las facturas no sean abonadas por los negocios librados.
¿Por qué no invertir tu dinero en un plan de pensiones, un fondo de capital riesgo, acciones bursátiles y facturas de empresas de la economía real? Gracias a plataformas como Inversa puedes complementar tus inversiones y apostar por diversificar las estrategias de inversión para limitar el riesgo, mientras consigues cumplir con tus objetivos.
No pongas todos los huevos en la misma cesta y evítate el disgusto de quedarte sin ninguno en caso de que la cesta se te caiga al suelo.