Hablemos de inversiones para cambiar el mundo

Hace unos días, se celebró en la ciudad egipcia de Sharm el Sheji la Conferencia sobre el cambio climático (COP 27). En ella se debatieron medidas para reducir las emisiones y caminar hacia unos modelos económicos sostenibles. Para ello, son indispensables las inversiones públicas, pero también las privadas. Al calor de dicho evento, os proponemos algo: hablemos de inversiones para cambiar el mundo. Hay frases que pasan a la historia. Una de ellas la pronunció John F. Kennedy durante su discurso de aceptación del cargo de presidente de Estados Unidos y ha sido tan referenciada que podríamos pensar que está muy manida: «No te preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país». Más allá del papel de liderazgo que deben jugar las administraciones públicas y las grandes compañías privadas, lo cierto es que la ciudadanía también puede contribuir a construir una economía más sostenible. Lo puede hacer cambiando sus hábitos de consumo, pero también realizando inversiones para cambiar el mundo. Apostando por proyectos empresariales que tengan un impacto positivo en nuestro planeta, negocios innovadores que contribuyan a reducir las emisiones y que sean sostenibles. La inversión ética está transformando la forma en que las personas invertimos nuestro dinero, introduciendo en la ecuación valores como la sostenibilidad medioambiental, que se complementan con la obtención de una rentabilidad económica. A ello se suma el hecho de que los marketplaces de financiación alternativa posibilitan que los pequeños ahorradores descubran proyectos empresariales innovadores que crean riqueza, a la vez que protegen el medio ambiente. A continuación, vamos a abordar por qué la financiación alternativa puede ser clave a la hora de facilitar la puesta en marcha de inversiones para cambiar el mundo.

Startups, empresas de la economía real y proyectos locales innovadores en búsqueda de financiación

La palabra startup ya forma parte de nuestro día a día. Es tal la relevancia y el potencial de crecimiento de estas empresas innovadoras que en España acaba de aprobarse una Ley de Startups para facilitar su puesta en marcha y consolidación. El texto legal, que entrará en vigor en enero, busca incentivar, precisamente, las inversiones en esta clase de proyectos. Modalidades de financiación alternativa como los Venture Capital o los Business Angels, han sido cruciales en la generación y crecimiento de miles de startups. Lo cual evidencia la conexión existente entre la financiación alternativa y el desarrollo de proyectos empresariales innovadores que contribuyen a transformar el mundo en el que vivimos. Más allá de las startups, lo cierto es que las inversiones para cambiar el mundo pueden ir en múltiples direcciones. Por ejemplo, dirigirse a apoyar a empresas de la economía real que generan empleo y riqueza y son socialmente responsables. O incentivar la puesta en marcha de proyectos fuertemente arraigados en lo local y que buscan crear puestos de trabajo y dinamizar zonas poco favorecidas por la globalización, como la denominada España Vaciada. ¿Qué papel pueden jugar los inversores en el fomento de este tipo de proyectos de negocio? Uno crucial: facilitar su financiación.

Regar con liquidez a proyectos transformadores para que puedan medrar

A la hora de poner en marcha empresas ecológicamente sostenibles y/o con repercusiones muy positivas para las comunidades donde se asientan, no basta con tener una buena idea. Para materializarla es necesario contar con financiación. Una persona puede tener una fantástica idea para lanzar un proyecto de turismo sostenible y de calidad en un bellísimo entorno rural, pero necesitará dinero no solo para acondicionar las instalaciones, sino también para invertir en tecnología, desde una web para tramitar las reservas, hasta un ERP para gestionar a los clientes y las cuentas. Las plataformas de financiación alternativa online abren un abanico de posibilidades de financiación para aquellos emprendedores y negocios dispuestos a materializar ideas transformadoras, socialmente responsables y ecológicamente sostenibles.

• Mediante el crowdequity pueden buscar inversores que apoyen sus proyectos, obteniendo derechos sobre ellos, como participaciones.
• A través del crowdlending, tienen a su disposición préstamos para poder afrontar los gastos y realizar inversiones para consolidar sus proyectos.
• Por la vía del crowdfactoring, pueden financiar facturas y obtener liquidez en el corto plazo para no dejar escapar oportunidades de negocio o afrontar situaciones inesperadas.

Los recursos económicos son esenciales para poder levantar proyectos transformadores. Y las diferentes modalidades de financiación alternativa permiten a estas empresas acceder a productos financieros que se ajusten a sus necesidades.

Animar la participación de una multitud de pequeños ahorradores

Del otro lado se encuentran todas aquellas personas que desean realizar inversiones para cambiar el mundo. La financiación alternativa les ofrece la oportunidad de contribuir a la transformación del tejido productivo y la sociedad abriendo nuevas vías de inversión, situadas más allá del sector financiero tradicional. En el imaginario colectivo está instalada la errónea idea de que los inversores son personas o compañías con grandes patrimonios o con muchos recursos económicos. Sin embargo, esto no es así. Los marketplaces de financiación alternativa como Inversa Invoice Market están pensados para facilitar a cualquier tipo de inversor la posibilidad de realizar inversiones para cambiar el mundo. En nuestra plataforma, se pueden realizar inversiones a partir de 20 euros. A nadie se le escapa que con 20 euros un negocio no puede hacer grandes cosas. Sin embargo, si una multitud de pequeños inversores emplea sus ahorros para financiar un proyecto, es posible que esos 20 euros adquieran algún que otro cero detrás. Como pasa con casi todo en esta vida, el empeño colectivo tiene más fuerza y capacidad de empuje que el esfuerzo individual. Por ello, las plataformas de financiación alternativa se han convertido en actores a tener en cuenta tanto en lo que respecta a las empresas de la economía real que necesitan liquidez, como en lo relativo a aquellas personas que deseen realizar inversiones para cambiar el mundo, aunque carezcan de grandes cantidades de dinero para invertir.

A diferencia del crowdfunding, en el que prima el altruismo, ya que una persona apoya un proyecto a cambio de meras recompensas, más simbólicas que otra cosa, otras modalidades de financiación alternativa como el crowdlending o el crowdfactoring no renuncian a ofrecer rentabilidad por las inversiones. Al contrario. Aquellas personas que desean realizar inversiones para cambiar el mundo sacrifican sus ahorros por el bien común, sino que emplean su dinero para apostar por proyectos social y ecológicamente responsables, buenos para el planeta, la economía y las personas. Todo ello sin renunciar a obtener beneficios económicos por ello. Por ejemplo, en las plataformas de crowdfactoring como Inversa se puede financiar a empresas que forman parte de la economía real, que crean empleo y riqueza en el ámbito local y, a su vez, obtener una rentabilidad por la operación. Lo mismo sucede en lo que respecta al crowdlending. Los inversores no prestan su dinero a cambio de nada, solo por el mero deseo de ayudar a proyectos empresariales innovadores o valiosos socialmente. Sino que además de ver como se les reembolsan sus recursos económicos, obtendrán unos intereses. Así, en el terreno de la financiación alternativa, las inversiones para cambiar el mundo concilian a la perfección un deseo de transformar la economía para proteger a la naturaleza, pero también a las personas, con el objetivo de rentabilizar los ahorros propios. Reinvertir para continuar con la transformación

Si todo esto fuese poco, al conseguir rentabilizar las inversiones para cambiar el mundo, los ahorradores pueden, incluso, reinvertir los beneficios obtenidos. De esta manera, no solo se protegen los ahorros frente a los efectos de la inflación, algo especialmente relevante en un contexto de alta inflación como el actual, sino que, además, se emplea el dinero para fomentar proyectos innovadores y transformar el mundo desde abajo. En definitiva, el éxito de las plataformas de financiación alternativa visibiliza que la posibilidad de realizar inversiones para cambiar el mundo está al alcance de los todos los inversores, por pequeños que sean. Y que aunque carezcamos de una gran cantidad de dinero que poder destinar a realizar inversiones, sí tenemos ante nosotros la posibilidad de sacarle partido a nuestros ahorros para obtener una rentabilidad por ellos y, a la vez, apoyar a las empresas socialmente responsables y sostenibles.